El escritor Heinrich Heine escribió en su tragedia Almasor (1821) “Ahí donde se queman libros se acaba quemando también seres humanos”.."—Dort, wo man Bücher verbrennt, verbrennt man am Ende auch Menschen.
Quizás nunca pensó el insigne escritor alemán que ello se haría realidad apenas cien años después en su misma Patria.
En Venezuela, por estos días leemos de la quema de una Universidad y un consultorio médico. No han sido los únicos lugares contra los que el odio opositor se ha ensañado. Pero más penoso es como los grandes Medios tratan de ocultar la verdadera raíz fascista de esa extrema derecha que hoy, más que oposición pacifica, pudiera bien llamarse oposición pirómana. Si hoy ellos han sido capaces de atentar contra la educación y la salud del pueblo venezolano, representadas en dichas instituciones sagradas, qué no serian capaces de hacer si retornaran al poder.
Algunas imágenes del odio pirómano:
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