Mike Hammer, funcionario del Departamento
de Estado estadounidense respondió el pasado jueves 31.05.2012 en un
vídeo, a preguntas de varios temas que le fueron enviadas a través de
Twitter por latinoamericanos, principalmente sobre Cuba y el esfuerzo
que hace Washington por “impulsar” las libertades” en la Isla.
Según Hammer, el problema de la libertad de prensa en Cuba es “serio y preocupante”,
en respuesta a una periodista independiente que, desde Cuba, le comentó
que no contaban con los medios de prensa como una computadora o una
grabadora, necesarios para romper la censura, ante lo que el
norteamericano le respondió: “Seguiremos insistiendo hasta el día en el
que usted y sus compañeros periodistas, que trabajan en condiciones muy
difíciles y peligrosas en Cuba, puedan hacerlo libremente”.
Lo
que no dijo este funcionario yanqui es que desde la Sección de
Intereses de Estados Unidos en la Habana, se preparan diariamente a
decenas de elementos contrarrevolucionarios en cursos para formarlos
como periodistas “independientes”, explicándoles como se busca la información, cómo se procesa y cómo se envía, además les entregan laptop, memorias flash, cámaras fotográficas y acceso libre a Internet
para trasladar las informaciones. A esto se suman los supuestos
turistas que los abastecen de estos recursos mas otros para imprimir y
trasmitir la información que obtienen.
A todo esto se le agregan los dólares que le envían para mantenerlos
contentos y hacerlos trabajar para los yanquis, sin que hasta la fecha
ninguno haya sido reprimido por sus acciones.
Si en Cuba no hubiese libertad de prensa ¿cómo es posible que los “diploperiodistas” dependientes de los norteamericanos puedan enviar sus reportes diarios a la TV y la Radio Martí y alimentar cientos de Twitter y Blog como Generación Y?
Más que libertad de prensa, en la Isla hay libertinaje de prensa, sino preguntarle a Carlos Serpa Maceira,
quien fue uno de los más destacados reporteros de Radio Martí, mimado
por los diplomáticos yanquis en la Habana y reportero casi exclusivo de
las Damas de Blanco, desclasificado en el 2011 como agente de la Seguridad del Estado Cubana y hoy periodista de varias emisoras radiales del país.
Lo cierto es que en Cuba ser contrarrevolucionario y tergiversar la realidad es un negocio muy jugoso, en el cual se reparte un porciento de los 20 millones de dólares,
que asigna el gobierno norteamericano cada año para sus acciones
subversivas y con ello las campañas mediáticas para desprestigiarnos,
pero todos deben tener presente que a pesar de ellas, ya cumplimos los
primeros 53 años de victorias y seguiremos adelante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario