Es por el mundo

No es París por quien deberíamos orar.
Es por el mundo. Un mundo en el cual Beirut,
sacudida por bombas dos días antes que París,
no tuvo cobertura de la prensa.
Un mundo en el cual una bomba explota
en un funeral en Bagdad
y ningún estado en Facebook dice “Bagdad”
porque ninguna persona blanca murió en ese atentado.
Hay que orar por el mundo
que culpa a la crisis de los refugiados por un ataque terrorista,
que no se detiene a diferenciar entre el atacante
y la persona que huye de lo mismo que huyes tú.
Hay que orar por el mundo
en el que personas caminando por meses por varios países
y cuya única pertenencia sobre sus espaldas
es decir que no tienen un lugar al cual ir.
Haz una oración por París de todos modos,
pero ora más
por todo el mundo que no tiene quien ore por él,
por todos aquellos que ya no tienen un hogar para defender,
por un mundo que se cae a pedazos en todos los rincones
y no sólo en las torres y en los cafés que nos son familiares.

Karuna Ezara Parikh
Tr. G.O.