viernes, 27 de enero de 2012

Ultrajarán a José Martí en Miami el próximo 28 de enero

Edmundo García
Luis Posada Carriles en Miami
A los extremistas de Miami no les bastaba con preparar banquetes para cuanto politiquero prometiera acabar con el gobierno cubano y sus líderes. No les bastaba con pedir  bendiciones para protectores de terroristas que han atentado contra la seguridad del pueblo y los visitantes a la isla. No les bastaba comparar con Mariana Grajales o Antonio Maceo a cuando advenedizo improvisado llegara a Miami hablando mal de los médicos de su Patria, de los deportistas de su Patria, de los maestros de su Patria. Al parecer no les bastaba con nada de esto y han preparado un monstruoso ultraje al Apóstol de Cuba José Martí  para el próximo sábado 28 de enero, día de su natalicio.
Cada cuarto de hora, en la caverna miamense de Radio Mambí, el locutor Armando Pérez Roura engola la voz en un comercial ridículo para invitar a una bochornosa reunión a las tres de la tarde de ese día en un teatro de Miami. Lo de bochornosa, lo de ultrajante es porque en nombre de Martí el servil locutor quiere ganarse puntos con los guapetones de la mafia anticubana. Cada doce o quince minutos el adulón de Pérez Roura, después de citar mal a Martí y desvariar sobre su ideario, se pone baboso y repite sin importarle el respeto: “No hay fecha más importante para los cubanos que la del nacimiento de José Martí, por eso estamos convocando al Teatro Artime donde también daremos nuestro apoyo a los  combatientes Luis Posada Carriles, Gaspar Jiménez Escobedo, Pedro Remón, César Matamoros y José Hurtado, a los que el régimen comunista quiere enviar de vuelta a Panamá para que los vuelvan a procesar”.
La vinculación de José Martí con esta pandilla es tan ofensiva, que en Miami se comenta que hasta la congresista Ileana Ros-Lehtinen dijo que no prometía participar en la infamia porque ese día iba a dar una entrevista a Fox News sobre las elecciones y que además tenía que hablar en un homenaje a Marco Rubio. Lo dice porque calcula la talla de la barbaridad, pero sabemos que estará allí, junto al congresista Mario Diaz-Balart y su hermano Lincoln. Y con David Rivera, que se invita solo a estas cosas. Además de ellos y la corte de torturadores  y matarifes que van a homenajear, no creo que asistan muchas otras  personas. Los buenos cubanos de Miami recordarán a Martí en sus casas, en los parques, en los paseos, junto a sus familiares y sus amigos.
Lejos de aquel contubernio de aspirantes al estercolero de la historia, de aquellos que la Patria no necesita, de esos que no tienen regreso.
El ultraje a José Martí preparado para el próximo sábado en Miami no tiene nada que envidiar en vileza al de aquellos marines norteamericanos que en el año 1949 profanaron el monumento al Apóstol en el Parque Central de La Habana orinándosele encima. Es igual de
obsceno lo que ahora promueve la emisora Radio Mambí. Curiosamente se trata de la misma emisora donde cada día Antúnez alardea de patriotismo, donde Yoani Sánchez encona a la comunidad cubana de Miami reportando crímenes y niños atrapados en los escombros de algún derrumbe, la misma emisora donde Martha Beatriz Roque hace fatalespredicciones sobre le economía cubana y se regodea contando los problemas cotidianos de sus vecinos.

miércoles, 25 de enero de 2012

La fruta que no cayó

Cuba se vio forzada a luchar por su existencia frente a una potencia expansionista, ubicada a pocas millas de sus costas, que proclamaba la anexión de nuestra isla, cuyo único destino era caer en su seno como fruta madura. Estábamos condenados a no existir como nación.
En la gloriosa legión de patriotas que durante la segunda mitad del siglo XIX luchó contra el aborrecible coloniaje impuesto por España a lo largo de 300 años, José Martí fue quien con más claridad percibió tan dramático destino. Así lo hizo constar en las últimas líneas que escribió cuando, víspera del rudo combate previsto contra una aguerrida y bien pertrechada columna española, declaró que el objetivo fundamental de sus luchas era: “… impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América. Cuanto hice hasta hoy, y haré, es para eso.”
Sin comprender esta profunda verdad, hoy no se podría ser ni patriota, ni revolucionario.
Los medios de información masiva, el monopolio de muchos recursos técnicos, y los cuantiosos fondos destinados a engañar y embrutecer a las masas, constituyen sin duda obstáculos considerables, pero no invencibles.
Cuba demostró que -a partir de su condición de factoría colonial yanki, unida al analfabetismo y la pobreza generalizada de su pueblo-, era posible enfrentar al país que amenazaba con la absorción definitiva de la nación cubana. Nadie puede siquiera afirmar que existía una burguesía nacional opuesta al imperio, tan cercana a  este se desarrolló que incluso poco después del triunfo envió catorce mil niños sin protección alguna a Estados Unidos, aunque tal acción estuvo asociada a la pérfida mentira de que sería suprimida la Patria Potestad, que la historia registró como operación Peter Pan y fue calificada como la mayor maniobra de manipulación de niños con fines políticos que se recuerde en el hemisferio occidental.
El territorio nacional fue invadido, apenas dos años después del triunfo revolucionario, por fuerzas mercenarias, -integradas por antiguos soldados batistianos e hijos de terratenientes y burgueses- armadas y escoltadas por Estados Unidos con buques de su flota naval, incluidos portaaviones con equipos listos para entrar en acción, que acompañaron a los invasores hasta nuestra isla. La derrota y la captura de casi la totalidad de los mercenarios en menos de 72 horas y la destrucción de sus aviones que operaban desde bases en Nicaragua y sus medios de transporte naval, constituyó una derrota humillante para el imperio y sus aliados latinoamericanos que subestimaron la capacidad de lucha del pueblo cubano.
La URSS frente a la interrupción del suministro de petróleo por parte de Estados Unidos, la ulterior suspensión total de la cuota histórica de azúcar en el mercado de ese país, y la prohibición del comercio creado a lo largo de más de cien años, respondió a cada una de esas medidas abasteciendo combustible, adquiriendo nuestra azúcar, comerciando con nuestro país y finalmente suministrando las armas que Cuba no podía adquirir en otros mercados.
La idea de una campaña sistemática de ataques piratas organizados por la CIA, los sabotajes y las acciones militares de bandas creadas y armadas por ellos, antes y después del ataque mercenario, que culminarían en una invasión militar de Estados Unidos en Cuba, dieron origen a los acontecimientos que pusieron al mundo al borde de una guerra nuclear total, de la que ninguna de sus partes y ni la propia humanidad habría podido sobrevivir.
Aquellos acontecimientos sin dudas costaron el cargo a Nikita Jruschov, que subestimó al adversario, desoyó criterios que les fueron informados y no consultó su decisión final con los que estábamos en la primera línea. Lo que pudo ser una importante victoria moral se convirtió así en un costoso revés político para la URSS. Durante muchos años las peores fechorías continuaron realizándose contra Cuba y no pocas, como su criminal bloqueo, se cometen todavía.
Jruschov tuvo gestos extraordinarios con nuestro país. En aquella ocasión critiqué sin vacilación el acuerdo inconsulto con Estados Unidos, pero sería ingrato e injusto dejar de reconocer su extraordinaria solidaridad en momentos difíciles y decisivos para nuestro pueblo en su histórica batalla por la independencia y la revolución frente al poderoso imperio de Estados Unidos. Comprendo que la situación era sumamente tensa y él no deseaba perder un minuto cuando tomó la decisión de retirar los proyectiles y los yankis se comprometieron, muy secretamente, a renunciar a la invasión.
A pesar de las décadas transcurridas que suman ya medio siglo, la fruta cubana no ha caído en manos yankis.
Las noticias que en la actualidad llegan de España, Francia, Iraq, Afganistán, Pakistán, Irán, Siria, Inglaterra, las Malvinas y otros numerosos puntos del planeta, son serias, y todas auguran un desastre político y económico por la insensatez de Estados Unidos y sus aliados.
Me limitaré a unos pocos temas. Debo señalar según cuentan todos, que la selección de un candidato republicano para aspirar a la presidencia de ese globalizado y abarcador imperio, es a su vez, -lo digo en serio- la mayor competencia de idioteces e ignorancia que se ha escuchado nunca. Como tengo cosas que hacer, no puedo dedicarle tiempo al asunto. De sobra sabía que sería así.
Ilustran más algunos despachos cablegráficos que deseo analizar, porque muestran el increíble cinismo que genera la decadencia de Occidente. Uno de ellos, con pasmosa tranquilidad, habla de un preso político cubano que, según se afirma, murió tras huelga de hambre que duró 50 días. Un periodista de Granma, Juventud Rebelde, noticiero radial, o cualquier otro órgano revolucionario, se puede equivocar en cualquier apreciación sobre cualquier tema, pero jamás fabrica una noticia o inventa una mentira.
En la nota de Granma se afirma que no hubo tal huelga de hambre; era un recluido por delito común, sancionado a 4 años por agresión que provocó lesiones en el rostro a su esposa; que la propia suegra solicitó la intervención de las autoridades; los familiares más allegados estuvieron al tanto de todos los procedimientos que se emplearon en su atención médica y estaban agradecidos por el esfuerzo de los especialistas médicos que lo atendieron. Fue asistido, afirma la nota, en el mejor hospital de la región oriental como se hace con todos los ciudadanos. Había muerto a causa de fallo multi-orgánico secundario asociado a un proceso respiratorio séptico severo.
El paciente había recibido todas las atenciones que se aplican en un país que posee uno de los mejores servicios médicos del mundo, los cuales se brindan gratuitamente, a pesar del bloqueo impuesto por el imperialismo a nuestra Patria. Es sencillamente un deber que se cumple en un país donde la Revolución tiene el orgullo de haber respetado siempre, durante más de 50 años, los principios que le dieron su invencible fuerza.
Más valdría realmente que el Gobierno español, dadas sus excelentes relaciones con Washington, viaje a Estados Unidos y se informe de lo que ocurre en las cárceles yankis, la conducta despiadada que aplica a los millones de presos, la política que se practica con la silla eléctrica y  los horrores que se cometen con los detenidos en las cárceles y los que protestan en las calles.
Ayer lunes 23 de enero, un duro editorial de Granma titulado “Las verdades de Cuba” en una página completa de ese órgano explicó detalladamente la insólita desvergüenza de la campaña mentirosa desatada contra nuestra Revolución por algunos gobiernos “tradicionalmente comprometidos con la subversión contra Cuba”.
Nuestro pueblo conoce bien las normas que han regido la conducta intachable de nuestra Revolución desde el primer combate y jamás mancillada a lo largo de más de medio siglo. Sabe también que no podrá ser jamás presionado ni chantajeado por los enemigos. Nuestras leyes y normas se cumplirán indefectiblemente.
Es bueno señalarlo con toda claridad y franqueza. El Gobierno español y la destartalada Unión Europea, sumida en una profunda crisis económica, deben saber a qué atenerse. Produce lástima leer en agencias de noticias las declaraciones de ambas cuando utilizan sus descaradas mentiras para atacar a Cuba. Ocúpense primero de salvar el euro si pueden, resuelvan el desempleo crónico que en número creciente padecen los jóvenes, y respondan a los indignados sobre los cuales la policía arremete y golpea constantemente.
No ignoramos que ahora en España gobiernan los admiradores de Franco, quien envió a miembros de la División Azul junto a las SS y las SA nazis para matar soviéticos. Casi 50 mil de ellos participaron en la cruenta agresión. En la operación más cruel y dolorosa de aquella guerra: el cerco de Leningrado, donde murieron un millón de ciudadanos rusos, la División Azul formó parte de las fuerzas que trataron de estrangular a la heroica ciudad. El pueblo ruso no perdonará nunca aquel horrendo crimen.
La derecha fascista de Aznar, Rajoy y otros servidores del imperio, debe conocer algo de las 16 mil bajas que tuvieron sus antecesores de la División Azul y las Cruces de Hierro con las que Hitler premió a los oficiales y soldados de esa división. Nada tiene de extraño lo que hace hoy la policía gestapo con los hombres y mujeres que demandan el derecho al trabajo y al pan en el país con más desempleo de Europa.
¿Por qué mienten tan descaradamente los medios de información masiva del imperio?
Los que manejan esos medios, se empeñan en engañar y embrutecer al mundo con sus groseras mentiras, pensando quizás que constituye el recurso principal para mantener el sistema global de dominación y saqueo impuesto, y de modo particular a las víctimas cercanas a la sede de la metrópolis, los casi seiscientos millones de latinoamericanos y caribeños que viven en este hemisferio.
La república hermana de Venezuela se ha convertido en el objetivo fundamental de esa política. La razón es obvia. Sin Venezuela, el imperio habría impuesto el Tratado de Libre Comercio a todos los pueblos del continente que lo habitan desde el Sur de Estados Unidos, donde se encuentran las mayores reservas de tierra, agua dulce y minerales del planeta, así como grandes recursos energéticos que, administrados con espíritu solidario hacia los demás pueblos del mundo, constituyen recursos que no pueden ni deben caer en manos de las transnacionales que le imponen un sistema suicida e infame.
Basta, por ejemplo, mirar el mapa para comprender el criminal despojo que significó para Argentina arrebatarle un pedazo de su territorio en el extremo sur del continente. Allí emplearon los británicos su decadente aparato militar para asesinar bisoños reclutas argentinos vestidos con ropas de verano cuando ya estaban en pleno invierno. Estados Unidos y su aliado Augusto Pinochet le dieron a Inglaterra un desvergonzado apoyo. Ahora, en víspera de las Olimpiadas de Londres, su Primer Ministro David Cameron también proclama, como ya lo hizo Margaret Thatcher, su derecho a usar los submarinos nucleares para matar argentinos. El gobierno de ese país desconoce que el mundo está cambiando, y el desprecio de nuestro hemisferio y de la mayoría de los pueblos hacia los opresores se incrementa cada día.
El caso de las Malvinas no es único. ¿Conoce acaso alguien cómo terminará el conflicto en Afganistán? Hace muy pocos días soldados norteamericanos ultrajaban los cadáveres de combatientes afganos, asesinados por los bombarderos sin pilotos de la OTAN.
Hace tres días una agencia europea publicó que “el presidente afgano Hamid Karzai, dio su aval a un negociado de paz con los talibanes, subrayando que esta cuestión debe ser resuelta por los ciudadanos de su país”, luego añadió: “…el proceso de paz y reconciliación pertenece a la nación afgana y ningún país u organización extranjera puede sacarles a los afganos este derecho.”
Por su parte, un despacho publicado por nuestra prensa comunicaba desde Paris que “Francia suspendió hoy todas sus operaciones de formación y ayuda al combate en Afganistán y amenazó con anticipar el retiro de sus tropas, luego de que un soldado afgano ultimara a cuatro militares franceses en el valle Taghab, de la provincia de Kapisa [...] Sarkozy dio instrucciones al Ministro de Defensa Gérard Longuet para trasladarse inmediatamente a Kabul, y avizoró la posibilidad de un retiro anticipado del contingente.”
Desaparecida la URSS y el Campo Socialista, el Gobierno de Estados Unidos concebía que Cuba no podía sostenerse. George W. Bush tenía ya preparado un gobierno contrarrevolucionario para presidir nuestro país. El mismo día que Bush inició su criminal guerra contra Iraq, solicité a las autoridades de nuestro país el cese de la tolerancia que se aplicaba a los cabecillas contrarrevolucionarios que en esos días demandaban histéricamente la invasión a Cuba. En realidad, su actitud constituía un acto de traición a la Patria.
Bush y sus estupideces imperaron durante 8 años y la Revolución Cubana ha perdurado ya más de medio siglo. La fruta madura no ha caído en el seno del imperio. Cuba no será una fuerza más con la que el imperio se extienda sobre los pueblos de América. La sangre de Martí no se habrá derramado en vano.
Mañana publicaré otra Reflexión que complementa esta.

Fidel Castro Ruz
Enero 24 de 2012
7 y 12 p.m.

martes, 24 de enero de 2012

Los casos de Alan Gross y de los Cinco cubanos

Salim Lamrani & Wayne S. Smith*/Center for International Policy
Es posible un cambio en las relaciones entre La Habana y Washington. Estados Unidos levantó todas las restricciones relativas a los viajes de los cubanos-estadounidenses a la isla y las remesas de estos destinadas a sus familias. Al mismo tiempo, el gobierno cubano favorece el establecimiento de pequeñas empresas privadas. Esta realidad abre el camino al fortalecimiento de los vínculos entre ambas comunidades, y más precisamente –como subrayó un observador- a «un flujo de capital de Estados Unidos hacia Cuba».
No obstante, por un lado el caso de Alan Gross, arrestado el 3 de diciembre de 2009, y por otro lado el de los Cinco Cubanos, representan un obstáculo mayor a la mejora de las relaciones.
¿Quién es Alan Gross?
Alan Gross es un ciudadano estadounidense de Potomac, Maryland, de confesión judía, de 61 años, que trabaja para el gobierno de Estados Unidos. Es un empleado de la Development Alternative, Inc (DAI), subcontratista de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID), la cual a su vez depende del Departamento de Estado. En diciembre de 2009, cuando Gross estaba a punto de salir de Cuba con una simple visa turística –en lo que constituía entonces su quinto viaje del año– los servicios de seguridad lo detuvieron en el aeropuerto internacional de La Habana. Una investigación había permitido establecer vínculos estrechos entre él y la oposición interna al gobierno cubano, a la cual distribuía computadoras portátiles y teléfonos satelitales, en el marco de un programa del Departamento de Estado de «promoción de la democracia en Cuba». [1]
Experto en tecnología de comunicación de larga distancia, Gross dispone de una gran experiencia en este campo. Ha trabajado en más de cincuenta naciones y ha elaborado sistemas satelitales de comunicación durante las intervenciones militares estadounidenses en Irak y Afganistán para eludir los canales controlados por las autoridades locales. [2]
La posesión de un teléfono satelital está rigurosamente prohibida en Cuba por razones de seguridad nacional. Por otra parte, el sector de las telecomunicaciones es un monopolio del Estado en Cuba y está prohibida cualquier competencia. [3]
¿Ayuda a la comunidad judía de Cuba?
El Departamento de Estado estadounidense, que exige la liberación del detenido, afirma que «Gross trabaja para el desarrollo internacional y viajó a Cuba para ayudar a los miembros de la comunidad judía de La Habana a conectarse con otras comunidades judías del mundo». Según Washington, las actividades de Gross eran legales y no han violado la legislación cubana. [4]
En octubre de 2010, con ocasión de la reunión anual de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Arturo Valenzuela, secretario de Estado asistente para los Asuntos Interamericanos, se entrevistó con Bruno Rodríguez, ministro cubano de Relaciones Exteriores, a propósito de Gross. Se trataba entonces del más importante encuentro diplomático entre representantes de ambas naciones desde el inicio de la era Obama.[5]
La familia de Alan Gross también aseguró que sus frecuentes viajes a la isla se destinaban a permitir que la comunidad judía de La Habana pudiera conseguir acceso Internet para poder comunicarse con los judíos del mundo entero. [6] Su abogado, Peter J Kahn, ratificó esas palabras: «Su labor en Cuba no tenía nada que ver con la política, sino que simplemente se proponía ayudar a mejorar la vida de los miembros de la pequeña, pacífica y no disidente comunidad judía en ese país».[7]
Seguramente Gross tenía contactos con algunos miembros de la comunidad judía en Cuba, aunque la propia comunidad judía de La Habana contradice la versión oficial de Estados Unidos y de la familia de Gross. En efecto, la comunidad afirma que no conoce a Alan Gross y que nunca se ha reunido con él a pesar de sus cinco estancias en Cuba en 2009. Adela Dworin, presidenta del Templo Beth Shalom, rechazó las afirmaciones de Washington: «Es lamentable […].Lo más triste es que se haya querido involucrar a la comunidad judía de Cuba, que es totalmente ajena».
Por su parte Mayra Levy, portavoz del Centro Hebraico Sefardí, aseguró que ignoraba quién era Gross y que éste jamás se había presentado a su institución. La Agencia estadounidense Associated Press señala por su parte que los «líderes de la comunidad judía de Cuba negaron que el contratista estadounidense Alan Gross […] hubiera colaborado con ellos». [8] Del mismo modo, la Agencia Telegráfica Judía precisa que «los principales grupos judíos de Cuba han desmentido cualquier contacto con Alan Gross y cualquier conocimiento de su programa». [9]
El reverendo Odén Marichal, secretario del Consejo de Iglesias de Cuba (CIC), que agrupa las instituciones religiosas cristianas así como a la comunidad judía de Cuba, ha ratificado esta posición durante una reunión con Peter Brennan, coordinador de los Asuntos Cubanos en el Departamento de Estado. Con ocasión de la Asamblea general de las Iglesias de Cristo de Estados Unidos en Washington, en noviembre de 2010, el líder religioso refutó las alegaciones de Gross. «Lo que sí dejamos bien claro es que la comunidad hebrea de Cuba, que es miembro del Consejo de Iglesias de Cuba, nos dijo: ‘Nosotros jamás tuvimos relación con ese señor, jamás nos trajo equipo de ninguna clase. Negaron cualquier relación con Alan Gross’». [10]
En efecto, la pequeña comunidad judía cubana, lejos de estar aislada, está perfectamente integrada en la sociedad y mantiene las mejores relaciones con las autoridades políticas de la isla. Fidel Castro, aunque se muestra sumamente crítico con respecto a la política israelí en los territorios ocupados, declaró al periodista estadounidense Jeffrey Goldberg que «nadie ha[bía] sido tan difamado como los judíos» en la historia. «Fueron rechazados de su tierra, perseguidos y maltratados en todo el mundo. Los judíos tuvieron una existencia mucho más dura que la nuestra. No hay nada que pueda compararse con el Holocausto», añadió. [11]
El presidente cubano Raúl Castro participó en la ceremonia religiosa de Hanuka –Fiesta de las Luces– en la sinagoga Shalom de La Habana en diciembre de 2010, la cual se transmitió en directo por la televisión cubana y fue primera plana del diario Granma. Aprovechó la ocasión para saludar a «a comunidad hebrea de Cuba y la fabulosa historia del pueblo hebreo».[12]
Por otra parte, la comunidad judía cubana dispone de todas las facilidades tecnológicas necesarias para comunicarse con el resto del mundo, gracias a la ayuda que proporcionan otras entidades judías internacionales como el Benai Brith and the Cuban Jewish Relief Project, el Canadian Jewish Congress (CJC), la World ORT, el Joint Distribution Committee (JDC) o el United Jewish Committee (UJC), con el acuerdo de las autoridades cubanas. [13]
Arturo López-Levy, secretario de Bnai Brith en la Comunidad Judía Cubana entre 1999 y 2001 y actualmente profesor de la Universidad de Denver, también se muestra escéptico a propósito de la versión estadounidense sobre el caso Gross. Al respecto, afirma lo siguiente:
“Gross no fue arrestado porque sea judío ni por sus supuestas actividades de ayuda tecnológica a la comunidad judía cubana, que ya disponía de un laboratorio informático, de correos electrónicos y de acceso a Internet antes de su llegada a La Habana. [Los judíos de Cuba] no se reúnen en una sinagoga para conspirar con la oposición política pues ello pondría en peligro la cooperación con el gobierno que es necesaria para las actividades como el programa de emigración a Israel, el proyecto de Derecho de Nacimiento, mediante el cual jóvenes judíos cubanos viajan a Israel cada año, o para tratar de la ayuda humanitaria. Para proteger lo más importante, se apartan todo lo posible de los programas de injerencia política estadounidenses en los asuntos internos cubanos. Gross viajó a Cuba no para trabajar con alguna organización judía sino para la USAID”.[14]
Por su parte Wayne S. Smith, embajador estadounidense en Cuba entre 1979 y 1982 y director del Programa «Cuba» del Centro de Política Internacional de Washington, señala que «Gross, en otras palabras, estaba implicado en un programa cuyas intenciones son claramente hostiles a Cuba ya que el objetivo es nada menos que el cambio de régimen». [15]
Actividades ilegales según las autoridades cubanas
Por parte de las autoridades cubanas, la versión oficial no ha convencido y Gross es sospechoso de actividades de espionaje y de subversión interna. [16] Ricardo Alarcón, presidente del Parlamento cubano, afirmó que el ciudadano estadounidense había violado la legislación del país. «Él violó leyes cubanas, la soberanía nacional, cometió delitos que en Estados Unidos son muy, muy castigados». [17]
En efecto, el empleado de la USAID proporcionaba equipos tecnológicos altamente sofisticados. La distribución y el uso de teléfonos satelitales están reglamentados en Cuba y está prohibido importarlos sin autorización. Por otra parte, el Artículo 11 de la Ley 88 cubana estipula que «El que, para la realización de los hechos previstos en esta Ley, directamente o mediante tercero, reciba, distribuya o participe en la distribución de medios financieros, materiales o de otra índole, procedentes del Gobierno de Estados Unidos de América, sus agencias, dependencias, representantes, funcionarios o de entidades privadas, incurre en sanción de privación de libertad de tres a ocho años».[18]
Este rigor no es específico de la legislación cubana. En efecto, la ley estadounidense prevé sanciones similares para este tipo de delitos. La Ley de Registro de Agentes Extranjeros (Foreign Agents Registration Act) sanciona a todo agente no registrado por las autoridades que «en Estados Unidos solicita, recolecta, proporciona o gasta contribuciones, préstamos, dinero u otro objeto de valor en su propio interés», con una pena de cinco años de prisión y una multa de 10.000 dólares.[19]
La legislación francesa también sanciona este tipo de actuación. Según el Artículo 411-8 del Código Penal, «el hecho de ejercer, por cuenta de una potencia extranjera, de una empresa u organización extranjera o bajo control extranjero o de sus agentes, una actividad con el objetivo de conseguir o proporcionar dispositivos, informaciones, procedimientos, objetos, documentos, datos informatizados o ficheros cuya explotación, divulgación o reunión tengan la naturaleza de atentar contra los intereses fundamentales de la nación se castiga con diez años de cárcel y 150.000 euros de multa». [20]
El 4 de febrero de 2011, el fiscal de la República de Cuba acusó formalmente a Alan Gross de «actos contra la integridad y la independencia de la nación», y pidió una pena de veinte años de cárcel. El 12 de marzo de 2011, Gross recibió finalmente la sentencia de quince años de prisión tras su juicio. [21] El abogado defensor, Peter J. Kahn, lamentó que su cliente estuviera «atrapado en el medio de una larga disputa política entre Cuba y Estados Unidos».[22]
El New York Times recuerda que Gross «fue arrestado en diciembre pasado durante un viaje a Cuba en el marco de un programa semiclandestino de la USAID, servicio de ayuda extranjera del Departamento de Estado destinado a socavar al gobierno de Cuba». El diario neoyorquino subraya también que «las autoridades estadounidenses han reconocido que el señor Gross entró en Cuba sin visa en regla, y han declarado que distribuía teléfonos satelitales a disidentes religiosos». [23]
Desde 1992 y la adopción de la ley Torricelli, Estados Unidos admite abiertamente que su objetivo con respecto a Cuba es un «cambio de régimen» y uno de los pilares de esta política consiste en organizar, financiar y equipar a una oposición interna. [24]
La USAID, encargada de la administración de este plan, admite que financia a la oposición cubana en el marco de este programa. Según la Agencia, para el año fiscal 2009, la suma de la ayuda destinada a los disidentes cubanos se elevó a 15,62 millones de dólares. En total, desde 1996, se han dedicado 140 millones  de dólares al programa destinado a derrocar al gobierno cubano. «La gran mayoría de esta suma se destina a individuos que se encuentran en Cuba. Nuestro objetivo es maximizar la suma del apoyo del cual se benefician los cubanos en la isla». [25]
La organización gubernamental enfatiza también el siguiente punto: «Hemos formado a centenares de periodistas en un periodo de diez años cuya labor ha aparecido en grandes medios de comunicación internacionales». Formados y estipendiados por Estados Unidos, responden ante todo a los intereses de Washington, cuyo objetivo es un «cambio de régimen» en la isla. [26]
Desde un punto de vista jurídico, esta realidad ubica de hecho a los disidentes que aceptan los emolumentos ofrecidos por la USAID en una situación de agentes al servicio de una potencia extranjera, lo que constituye una grave violación del código penal en Cuba. La Agencia es consciente de esta realidad y se limita a recordar que «nadie está obligado a aceptar o formar parte de los programas del gobierno de Estados Unidos». [27]
Judy Gross, la esposa de Alan Gross, fue autorizada a visitarlo en prisión por primera vez en julio de 2010. [28] Aprovechó la ocasión para transmitir un correo al presidente cubano Raúl Castro. Expresó su arrepentimiento y pidió disculpas por los actos de su marido. «Reconozco hoy que el gobierno cubano no aprecia el tipo de trabajo que Alan hacía en Cuba. Su intención nunca ha sido dañar a su gobierno».[29]
Judy Gross acusa al Departamento de Estado de no haber explicado a su esposo que sus actividades eran ilegales en Cuba. «Si Alan hubiera sabido que algo le pasaría en Cuba, no habría hecho eso. Pienso que no lo han informado claramente de los riesgos». [30]
¿Una salida de la crisis ?
Obviamente Groos violó la ley. No hay dudas al respecto. Por otra parte no parece que haya ocasionado un verdadero perjuicio y su encarcelamiento no beneficia en nada a Cuba. En cambio su liberación podría mejorar sensiblemente las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, sobre todo si Gross pidiese disculpas por sus actos.
El asunto Gross-USAID parece vinculado a la suerte de los cinco agentes cubanos condenados a severas penas de prisión en Estados Unidos y encarcelados desde 2008. Igual que Estados Unidos, que señaló que no ocurrirá ningún cambio sustancial mientras no se solucione el caso de Gross, las autoridades cubanas también parecen renuentes a cualquier acercamiento mientras los Cinco Cubanos permanezcan en prisión. Después de una serie de atentados con bombas contra los centros turísticos de La Habana, el gobierno cubano envió a los cinco agentes para que se infiltraran en los grupos terroristas anticastristas de Florida y recogieran información sobre sus planes. La idea era entregar después dicha información al FBI para que pudiera neutralizar a los grupos terroristas. En junio de 1998 tuvo lugar en La Habana un encuentro de varios días entre representantes del FBI y las autoridades cubanas. Se entregaron casi 42 informes al FBI. Entonces las autoridades cubanas esperaban que Estados Unidos actuara contra los terroristas, pero no ocurrió nada de eso. Poco después el FBI arrestó a los cinco agentes cubanos, es decir, encarcelaron a los que proporcionaron las pruebas en vez de a los terroristas. Los Cinco Cubanos fueron «juzgados» y declarados culpables. El juicio fue un escándalo. La fiscalía no tenía pruebas, por esa razón acusó a los Cinco de «conspiración» para cometer actos ilegales (cargo que no requiere pruebas, basta con convencer al jurado). Además los juzgaron en Miami, donde el sentimiento anticastrista está tan exacerbado (véase el caso de Elián González) que resultaba imposible reunir un jurado imparcial. Los abogados de la defensa solicitaron una deslocalización del juicio pero, contra toda previsión, se la denegaron.
El caso de Gerardo Hernández, acusado de «conspiración» de asesinato –en relación con la destrucción por el ejército cubano de dos aviones de la organización anticastrista «Hermanos al Rescate» en febrero de 1996- y condenado a dos cadenas perpetuas más 15 años, es sin lugar a dudas el peor de todos. El hecho de que no se pudiera presentar ninguna prueba que demostrara su implicación no fue importante para el jurado. Gerardo sigue tras las rejas, a veces en aislamiento, y después de tantos años todavía no le han autorizado a ver a su mujer ni una sola vez.
Esta injusticia contradice la fama de Estados Unidos de estar al servicio de la ley. Hay que encontrar una solución. El mantenimiento en prisión de esas personas después de tantos años, sin ninguna prueba que las incrimine salvo el hecho de ser agentes sin registrar de una potencia extranjera, es digno de la Guerra Fría (una práctica injustificable incluso en aquella época). Ahora, después de más de dos décadas del final de la Guerra Fría, mientras aparece una oportunidad sin precedentes de instaurar una nueva relación entre Cuba y Estados Unidos, esta detención es moralmente injustificable y singularmente contraproducente. Ya es hora de emprender un proceso de revisión de todos esos casos y permitir a esas personas que se reúnan con sus familias. Uno de ellos, René González, ya fue liberado tras cumplir su pena. Todavía tiene que cumplir una condena de tres años de libertad condicional. Por increíble que parezca, no le han autorizado el regreso a Cuba para encontrarse con su esposa, a la que no ve desde hace más de una década. Permitirle regresar a Cuba debería ser la primera decisión a tomar en este proceso de reconciliación. Si Estados Unidos decide actuar con respecto a los Cinco Cubanos, naturalmente Cuba también deberá liberar a Alan Gross para que se reúna con su familia.
Conviene señalar que el propio Alan Gross sugirió una iniciativa de ese tipo, «Cuando se enteró del reciente intercambio de Gilad Shalit (el soldado israelí) por más de 1.000 palestinos encarcelados (Gross) expresó su idea de que Estados Unidos y cuba podían hacer lo mismo con respeto a él y los Cinco Cubanos», explicó el rabino David Shnever que había visitado a Gross en La Habana. [31]
Notas
[1] Jeff Franks, «Scenarios-U.S. Contractor Jailed in Cuba Still in Limbo», Reuters, 24 de octubre de 2010.
[2] Phillip J. Crowley, «Statement on Anniversary of Alan Gross’ Incarceration in Cuba», U.S. Department of State, 3 de diciembre de 2010; Saul Landau, «The Alan Gross Case», Counterpunch, 30 de julio de 2010. http://www.counterpunch.org/landau07302010.html (sitio consultado el 18 de febrero de 2011).
[3] Ibid.
[4] Phillip J. Crowley, «Statement on Anniversary of Alan Gross’ Incarceration in Cuba», op. cit.
[5] Paul Haven, «U.S., Cuban Diplos Met About Jailed U.S. Man», The Associated Press, 18 de octubre de 2010.
[6] Anthony Broadle, «Exclusive: American Held in Cuba Expresses Regret to Raul Castro», Reuters, 24 de octubre de 2010.
[7] Juan O. Tamayo, «Pedirán 20 años de cárcel para Gross», El Nuevo Herald, 5 de febrero de 2011.
[8] Andrea Rodríguez, «Judíos niegan haber colaborado con Alan Gross», The Associated Press, 2 de diciembre de 2010.
[9] Jewish Telegraphic Agency, «Cuba to Seek 20- Year Prison Term for Alan Gross», 6 de febrero de 2011.
[10] Andrea Rodríguez, «EEUU pide Iglesias de Cuba interesarse por contratista preso», The Associated Press, 2 de diciembre de 2010.
[11] Jeffrey Goldberg, «Castro: ‘No One Has Been Slandered More Than the Jews’», The Atlantic, 7 de diciembre de 2010. http://www.theatlantic.com/international/archive/2010/09/castro-no-one-has-been-slandered-more-than-tthe-jews/62566/ (sitio consultado el 18 de febrero de 2011).
[12] The Associated Press, «Raúl Castro Celebrates Hanukkah With Cuban Jews»; Juan O. Tamayo, «Raul Castro asiste a fiesta de Janucá en sinagoga de La Habana », El Nuevo Herald, 6 de diciembre de 2010.
[13] Comunidad Hebrea de Cuba, «Quienes ayudan». http://www.chcuba.org/espanol/ayuda/quienes.htm (sitio consultado el 18 de febrero de 2011).
[14] Arturo López-Levy, «Freeing Alan Gross: First Do No Harm», Agosto de 2010. http://www.thewashintonnote.com/archives/2010/08freeing_alan_gr/ (sitio consultado el 18 de febrero de 2011).
[15] Wayne S. Smith, «The Gross Case and the Inanity of U.S. Policy», Center for International Policy, marzo de 2011. http://ciponline.org/pressroom/articles/030411_Smith_Intelligence_Brief_Gross.htm (sitio consultado el 18 de febrero de 2011).
[16] Paul Haven, «U.S. Officials Ask Cuba to Release Jailed American», The Associated Press, 19 de febrero de 2010.
[17] Andrea Rodríguez, «Contratista de EEUU violó soberanía de Cuba, dice alto dirigente», The Associated Press, 11 de diciembre de 2010.
[18] Ley de protección de la independencia nacional y la economía de Cuba (LEY N˚. 88), Artículo 11.
[19] U.S. Code, Title 22, Chapter 11, Subchapter II, § 611, iii <<Definitions>>, § 618, a, 1 <<Violations; false statements and willful omissions>>.
[20] Code Pénal, Partie législative, Livre, Titre Ier, Chapitre I, Section 3, Article 411-8.
[21] William Booth, «Cuba Seeks 20 Year Jail term for Detained American», The Associated Press, 4 de febrero de 2011.
[22] Paul Haven «Cuba Seeks 20-Year Jail term for Detained American», The Associated Press, 4 de febrero de 2011.
[23] Ginger Thompson, «Wife of American Held in Cuba Pleads for His Release and Apologizes to Castro», The New York Times, 24 de octubre de 2010.
[24] Cuban Democracy Act, Titre XVII, Article 1705, 1992.
[25] Along the Malecon, «Exclusive: Q & A with USAID», 25 de octubre de 2010. http://alongthemalecon.blogspot.com/2010/10/exclusive-q-with-usaid.html (sitio consultado el 26 de octubre de 2010); Tracey Eaton, «U.S. government aid to Cuba is the spotlight as contractor Alan Gross marks one year in a Cuban prison», El Nuevo Herald, 3 de diciembre de 2010.
[26] Ibid.
[27] Ibid.
[28] Jessica Gresko, «U.S. Man Jailed in Cuba Can Call Home More Often», The Associated Press, 26 de octubre de 2010.
[29] Anthony Boadle, «Exclusive: American Held in Cuba Expresses Regret to Raul Castro», op. cit.; Jeff Frank, «Factbox: Jailed U.S. Contractor, Sour U.S.-Cuba Relations», Reuters, 24 de octubre de 2010.
[30]Anthony Boadle, «Exclusive: American Held in Cuba Expresses Regret to Raul Castro », op. cit., EFE, «EEUU no negocia liberación de Alan Gross», 8 de febrero de 2011.
[31] Agence France Presse, «Contratista de EE UU en Cuba sugiere intercambio de espías», 8 de noviembre de 2011.
*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor encargado de cursos en la Universidad Paris-Sorbonne-Paris IV y en la Universidad Paris-Est Marne-la-Vallée y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Etat de siège. Les sanctions économiques des Etats-Unis contre Cuba, París, Ediciones Estrella, 2011, con un prólogo de Wayne S. Smith y un prefacio de Paul Estrade. Contacto: Salim.Lamrani@univ-mlv.fr
Diplomático de profesión, Doctor de la Universidad de George Washington, Wayne S ; Smith es profesor en la Universidad Johns Hopkins de Washington y Director del Proyecto Cuba del Centro de Política Internacional. De 1979 a 1982, fue jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en Cuba. Es autor de varios libros sobre Cuba entre los cuales se encuentra The Closest of Enemies (New York: W. W. Norton, 1987).
En inglés: http://cipcubareport.wordpress.com/2012/01/17/the-cases-of-alan-gross-and-the-cuban-five/

sábado, 21 de enero de 2012

Cuba califica de inaceptables declaraciones de gobierno español

Minrex

Cuba calificó de inaceptables las declaraciones del gobierno español que no tiene la más mínima autoridad moral para enjuiciar a la nación caribeña.
Diversos medios de prensa se han hecho eco de declaraciones formuladas por la Vicepresidente del gobierno español del Partido Popular Soraya Sáenz y del Comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España, en relación con la muerte del recluso común cubano Wilman Villar Mendoza.
El recluso había sido sancionado por golpear y lesionar en público a su esposa y agredir luego a los agentes de policía que acudieron ante la denuncia de la madre de esta.
Por su parte, la Alta Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad Común Catherine Ashton ha dicho que este caso plantea dudas sobre el sistema judicial y penitenciario cubanos.
Consultado por Prensa Latina un funcionario de la cancillería cubana declaró que “es insólito que teniendo el gobierno de España la mitad de sus jóvenes en paro y una alta tasa de asesinatos y violencia contra las mujeres, se gaste dinero en una campaña para presentar una brutal agresión a la esposa como disidencia política”.
Asimismo, manifestó además el “enérgico rechazo a estas inaceptables declaraciones, realizadas sin siquiera averiguar o esperar a conocer qué ocurrió realmente”.
“Ni al gobierno español ni a la Unión Europea les asiste la más mínima autoridad moral para enjuiciar a Cuba”, indicó.
La misma fuente aseveró que “en vez de dedicarse a estas burdas tergiversaciones de la realidad, deberían ocuparse de investigar y sancionar las numerosas muertes en detención que ocurren en sus instituciones, los frecuentes actos de brutalidad policial contra manifestantes que suceden sistemáticamente en España y otros países de la Unión Europea”.
También tendrían que investigar “los crímenes y maltratos contra los inmigrantes, los vuelos secretos de la CIA con personas secuestradas y la existencia de cárceles secretas o la participación de sus oficiales en actos de tortura”, enfatizó.
(Con información de Prensa Latina)

Nota del gobierno cubano sobre la muerte de Wilman Villar Mendoza


Bandera Cubana 

Nota informativa
A las 18:45 horas del 19 de enero falleció en Santiago de Cuba el recluso común Wilman Villar Mendoza,  en la sala de cuidados intensivos del  hospital  Clínico Quirúrgico “Doctor Juan Bruno Zayas”, a causa de fallo multi-orgánico secundario a un proceso respiratorio séptico severo, que llevó al paciente a un shock por sepsis.
Esta persona había sido remitida con urgencia el pasado 13 de enero del centro penitenciario “Aguadores”,  al hospital provincial “Saturnino Lora”,  al  presentar síntomas de una neumonía severa del pulmón izquierdo, recibiendo todas las atenciones  para este tipo de afecciones, aplicándosele ventilación y nutrición artificial, fluidoterapia, hemoderivados, apoyo con drogas vasoactivas y antibióticos de amplio espectro de última generación.
El hospital clínico quirúrgico “Juan Bruno Zayas”, donde falleció, es uno de los  centros hospitalarios de mayor nivel en la región oriental y su sala de terapia intensiva cuenta con una gran experiencia en la atención al paciente grave.
Villar Mendoza residía en el municipio Contramaestre, provincia Santiago de Cuba y cumplía  sanción de privación de libertad desde el 25 de noviembre del año 2011, por los delitos de Desacato, Atentado y Resistencia.
El hecho por el que fue sancionado se produjo durante un escándalo público en el que agredió y provocó lesiones en el rostro a su esposa, ante lo que su suegra solicitó la intervención de las autoridades y al acudir agentes de la PNR se resistió y los agredió.
Sus familiares más allegados estuvieron al tanto de todos los  procedimientos que se emplearon en su atención médica, además de reconocer el esfuerzo del equipo de especialistas que lo atendió.
En relación con este hecho, desde hace varios días agencias de prensa extranjeras, en particular de Miami, vienen promoviendo una intensa campaña internacional difamatoria, en contubernio con elementos contrarrevolucionarios internos, que presentan a Villar Mendoza como un supuesto “disidente” que falleció tras realizar una huelga de hambre en prisión. Al respecto se disponen de abundantes pruebas y testimonios que demuestran que no era un “disidente” ni estaba en huelga de hambre.
Wilman Villar después de haber cometido el delito, por el cual fue procesado en libertad, comenzó a vincularse con elementos contrarrevolucionarios en Santiago de Cuba, quienes le hicieron creer que su presunta pertenencia a los grupúsculos mercenarios le permitiría evadir la acción de la justicia.
Cuba lamenta la muerte de cualquier ser humano;  condena enérgicamente las burdas manipulaciones de nuestros enemigos, y sabrá desmontar esta nueva agresión con la verdad y la firmeza que caracteriza a nuestro pueblo.

martes, 17 de enero de 2012

Galeano denuncia limitaciones que impone el bloqueo a Cuba en Internet

 
El escritor Eduardo Galeano, en diálogo con la prensa, luego dejar inaugurada la 53 edición del Premio Casa de las Américas, refirió haber sufrido en carne propia durante su visita a Cuba las prohibiciones que impone el gobierno norteamericano para el acceso a Internet desde la Isla. “…me he topado con ese cartelito de ‘You want to enter from a forbidden country’, ‘Usted quiere entrar desde un país prohibido’. Yo pensé, ‘que orgulloso estoy de ser casi compatriota de los habitantes de ese país prohibido’, porque el asunto está en preguntarse, ‘¿prohibido por quién?, ¿prohibido por qué?’”, relató el autor de El libro de los abrazos.
Cuba está viviendo un período, más que un momento, un período apasionante de cambios. Creo que eran cambios que la realidad fue incubando, que no nacieron como Atenea de la cabeza de ningún dios, nacieron de la energía acumulada por una sociedad que es capaz de cambiar, y esa es la prueba de que está viva. Es evidente que se había llegado por un camino que tuvo su sentido y fue impuesto por las circunstancias, porque la Revolución Cubana hizo lo que pudo y no lo que quiso; a raíz del bloqueo y mil y una formas de límites impuestos desde afuera al desarrollo de su energía creadora, hasta llegar a los días de ahora, intentando heroicamente comunicarme por Internet desde el hotel donde estoy.
“Percibo una indudable buena voluntad de todos por ayudarme pero hemos chocado siempre con los problemas derivados de una de las formas de bloqueo, el bloqueo de las comunicaciones, que rara vez se menciona pero es muy importante. Entonces, me he topado con ese cartelito de ‘You want to enter from a forbidden country’, ‘Usted quiere entrar desde un país prohibido’. Yo pensé, ‘que orgulloso estoy de ser casi compatriota de los habitantes de ese país prohibido’, porque el asunto está en preguntarse, ‘¿prohibido por quién?, ¿prohibido por qué?’. Quizás prohibido porque a pesar de todas sus contradicciones y dificultades sigue siendo un ejemplo de dignidad nacional para los otros países, a veces ninguneados, pobres, pequeños, que no tienen derecho al patriotismo porque el patriotismo es el privilegio de los países mandones, de los ricos, de los poderosos, que son los que juzgan a los demás y dictan sentencia. También prohibido por el peligroso ejemplo de la solidaridad, porque Cuba ha sido y sigue siendo capaz de practicar, a pesar de sus condiciones de vida muy difíciles. Yo creo que esos dos contagios han puesto tantas  trabas, tantos palos en las ruedas de los procesos de cambio que esta Revolución necesita llevar adelante y que de ahí viene lo de ‘forbidden country’, ‘país prohibido’. Si es por eso yo también quiero ser prohibido, como el país donde estoy. (Con información de Cubadebate)

domingo, 15 de enero de 2012

Mensaje de Tony: Con olor a yerba

Queridos amigos: Ayer, jueves día 12, cuando por fin tuve acceso a este servicio, tras mi llegada a esta prisión el día anterior, les escribí un mensaje a primera hora (las 6 y algo de la mañana), como también lo hago ahora.
No sé si les llego a todos. No sé ni a qué hora les llego. Por algún motivo este servicio parece que funciona aquí con una lentitud exagerada. Al menos sé que ayer me había escrito mi hermana y aún hoy no he recibido sus líneas ni ningún otro mensaje. Pero todo es un problema de adaptarse a los cambios y tomar las cosas con la debida calma y objetividad.
No recuerdo si alguna vez les escribí sobre un cuento budista que trata sobre esas cosas que suceden y que a veces juzgamos como una desdicha y resultan al final una dicha.
En breve se los narro:
“Había un anciano que vivía en una aldea con su hijo joven. Tenían un caballo con el que trabajaban la tierra. Un buen día se les escapó el caballo.
Vinieron los vecinos y le decían al anciano: "¡Mire qué desdicha, ahora sin caballo!".
Y él les respondía: "Puede ser una desdicha o una dicha".
A los pocos días apareció el caballo seguido de una manada de caballos salvajes y todos fueron a parar su corral. Ahora tenían varios caballos.
Vinieron los vecinos y le dijeron: "¡Mire que dicha, ahora tiene varios caballos!".
Y el volvió a responderles: "Puede ser una dicha o una desdicha".
No tardó el hijo en comenzar a domesticar los caballos recién llegados. Pero sufrió una caída de uno de ellos que le produjo una fractura.
No tardaron en venir los vecinos y le decían: "¡Mire que desdicha, ahora su hijo no puede ayudarlo!".
Y el anciano, como siempre sereno, les reiteró: "Puede ser una desdicha o una dicha". No pasaron dos días del fatal accidente y vino el ejército recogiendo a todos los jóvenes de la aldea para llevarlos a una guerra. El único joven excluido fue el hijo del anciano. Los vecinos no fueron a verlo esta vez. Aprendieron su lección”.
Las cosas han de tomarse con serenidad, con objetividad y viéndolas como una oportunidad para crecer, aprender y seguir adelante. Vencer los obstáculos hace la vida ser vida.
Marianna en muchas cosas es una "maravilla" (sin tener cosas maravillosas), si la comparamos con Florence. Mi mayor impresión, tras mi arribo aquí, ha sido poder ver la yerba, sentir la tierra fresca y el olor de la vegetación, no abundante, pero suficiente para, tras más de trece años sin tener contacto con el verdor, sentir que es una dicha.
Estoy seguro que pronto los que controlan este servicio se verán muy sorprendidos por la cantidad de mensajes que ustedes, nuestros queridos incansables e incalificables amigos, nos envían.
Seguimos en contacto.
Cinco abrazos.
¡Venceremos!
Tony Guerrero
FCI Marianna
13 de enero de 2012
6 y 45 a.m.

¿Y si Posada Carriles no fuera cubano?

En la foto: Posada Carriles mientras participa en un convite terrorista en Miami, junto a la Dama de Blanco  Reina Luisa Tamayo (a la derecha)


Por Edmundo García

¿Y si Posada Carriles, en lugar de cubano, fuera israelí? ¿Y si Posada  Carriles fuera un israelí que hubiera atentado contra Israel? Pues de  poco le valdría celebrar sus fiestas en fincas privadas de Miami  porque le pondrían micrófonos hasta en los lechones que se come. Y le  sería inútil rodearse de jala levas como guardaespaldas porque hasta su barbero se lo hubiera reclutado el Mossad. Si Posada Carriles fuera  israelí cada mañana su despertador aparecería cambiado de sitio y su  radio sintonizado en otra estación. Y lo principal: si Posada Carriles fuera israelí a lo mejor hace rato hubiera volado a Jerusalén como Director de una delegación de citricultores, acompañado de jóvenes académicos de seis pies aficionados al Kung-fu y las gafas oscuras.

¿Y si Posada Carriles fuera ruso? ¿Y si Posada Carriles fuera un ruso que hubiera atentado contra Rusia? Pues cada 7 de octubre amanecería rezando porque no le trajeran ni se llevaran su correo, porque sabe Dios lo que podría ocurrírsele a los chicos de la FSB (nieta de la KGB) ese día de cumpleaños de Putin. Si Posada fuera ruso a lo mejorno hablara, porque los fusileros bolos afinan puntería con huevos de esturión del Volga y no suelen fallar los disparos. Ni fallan en San Petersburgo. Ni fallan en Guatemala. Y si fallaran, todavía le quedaría afrontar la variante Ramón Mercader, que sugiere emplear instrumentos menos sonoros en sus misiones. Si Posada fuera ruso tratara de vivir discretamente en Miami y a lo mejor hasta hubiera renunciado a las llaves de Hialeah. Porque Posada Carriles sabe muy bien que Moscú, lo que se dice Moscú, no cree en lágrimas.

¿Y si Posada Carriles fuera inglés? ¿Y si Posada Carriles fuera un inglés que hubiera atentado contra la Gran Bretaña? Si a Posada Carriles se le hubiera ocurrido no más que enviar a un mercenario a explotar un siquitraque en el lobby del más barato Motel de Londres, los fanáticos de todos los clubes de cricket, de fútbol y de rugby del Reino Unido barrerían con el ejecutor las gradas de los estadios y a su mentor lo perseguirían hasta en los sueños, tanto el M16 como el sindicato de escritoras policiales. Y la prensa calladita, porque ya se sabe como son por allá y Posada es demasiado poca cosa para molestarlos.

¿Y si Posada Carriles fuera norteamericano? ¿Y si Posada Carriles fuera un norteamericano que hubiera atentado contra Estados Unidos? Entonces no estoy muy seguro de que el gobierno de Washington le seguiría dando protección; ni que contaría con el apoyo de políticos, abogados y empresarios de Miami; ni que algunos locutores de radio y televisión del sur de la Florida se atreverían a mostrarle abiertamente su apoyo. Si Posada Carriles fuera norteamericano y se escondiera en un iglú del Polo Norte, hasta allá podrían enviarle un Drone a saludarle. A esta altura, los chicos de la Compañía habrían encontrado alguna manera de darle de baja; o se lo hubieran regalado hace rato a otra gente que lo quisiera. A los jueces venezolanos, por ejemplo.

Pero Posada Carriles es cubano. Y por principio, y ética, Cuba no practica secuestros ni ejecuciones extrajudiciales. Por el peligro que supone para el país y sus funcionarios y diplomáticos residentes fuera de la isla, estoy seguro que Posada Carriles siempre ha estado bajo la mira de los servicios especiales cubanos. En Panamá, en El Salvador, en Guatemala… Posada Carriles ha sido monitoreado y hasta filmado por personas responsabilizadas con la seguridad del país; la televisión cubana ha hecho pública imágenes del seguimiento y las autoridades de cada país han sido informadas en su momento sobre las actividades en
esos países; como ocurrió en el caso de Panamá. Pero no ha pasado de ahí; vuelvo a repetirlo, porque Cuba no secuestra, porque Cuba no ejecuta a personas fuera de la ley, aunque tenga el derecho moral de
hacerlo. Así es Cuba. Así es la Revolución. Así es Fidel y así es Raúl.

jueves, 12 de enero de 2012

La barrera subjetiva del color de la piel

autentica_cuba
...engendro reciente de publicidad banal denominada «Auténtica Cuba», algo más parecido al extinto partido político de Ramón Grau San Martín y con una tipografía que alude a la Coca-Cola, que a un programa pensado para promover lo más representativo y trascendental de la cultura nacional. Anti-ejemplos como ese deben avergonzar a cualquier cubano con un mínimo de dignidad por su cultura.
Entrevista con el Doctor y Profesor universitario Jesús Guanche Pérez

Rosa María de Lahaye Guerra.- Profesor, en esta primera entrevista del 2012, seguimos conversando sobre el tema racial que tan vigente lo notamos en el mundo académico, político y hasta en la realidad vecinal.

Jesús Guanche Pérez.- Para nadie es secreto que el racismo persiste, pero no de manera estructural como en determinados países, que tratan de exportarlo a nuestro contexto ⎯me refiero a los vecinos más cercanos del norte⎯, sino que se aprecia en el entramado social de manera diversa y multidireccional, se observa como prejuicio racial, que es una manifestación específica del racismo y se constata en actos declarados, opiniones y sentimientos, aunque no siempre publicados. El racismo y la discriminación racial son ilegales en Cuba, pero algo más de medio siglo de Revolución no bastan para eliminar la pesada carga de un flagelo identificado como el mito más perverso de la humanidad, pues si bien las «razas» en la especie humana no existen, si existe con una fuerza indeleble las desigualdades sociales y los criterios clasificatorios derivados de esas desigualdades.

R.M.L.G.- Estereotipos, prejuicios…

J.G.P.- Sí, sí. Existe la barrera subjetiva del color de la piel objetivada en prejuicios y juicios injustos sobre la diversidad fenotípica de las personas. Los estudios más recientes muestran, por ejemplo, el racismo y la ignorancia en el ámbito turístico y vale denunciar ese engendro reciente de publicidad banal denominada «Auténtica Cuba», algo más parecido al extinto partido político de Ramón Grau San Martín y con una tipografía que alude a la Coca-Cola, que a un programa pensado para promover lo más representativo y trascendental de la cultura nacional. Anti-ejemplos como ese deben avergonzar a cualquier cubano con un mínimo de dignidad por su cultura.
Estereotipos hay en todas direcciones, pero en Cuba, como en otros muchos países de América Latina, especialmente hispano y lusohablantes, decir mi negro, mi negra, mi chino o mi china, no tienen obligatoriamente una connotación racista, sino todo lo contrario, es un signo de afecto, de convivencia, aunque la persona designada no tenga nada de negro ni de chino; pero en otros contextos sociales también estos términos tienen una connotación despectiva, desde «blanco sucio» hasta «negro escandaloso», todo depende, no tanto del texto (discurso), como del contexto y del intertexto; es decir, de la situación particular en que el prejuicio racista se manifiesta.
Eso pasa también por el trauma personal e intergeneracional del supuesto «pelo bueno» y «pelo malo». Esa es una de tantas falacias del racismo y de las clasificaciones humanas a partir del fenotipo de los clasificadores. En ese sentido yo me pongo de ejemplo de tener pelo bueno y pelo malo. El pelo bueno es el que me puedo peinar y el pelo malo fue el de las entradas y la tonsura, pues ya se cayó. Los calvos tienen mucho más pelo malo que yo y los peludos mucho más pelos buenos, independientemente del color, la textura y el grosor. Por eso, pelo bueno es el que perdura en el cuero cabelludo y pelo malo es el que se cae por herencia, descuido o seborrea.
R.M.L.G.- Siento que el debate hierve, pero no cuaja… ¿qué estará pasando?
J.G.P.- Problema que no se identifica adecuadamente es como si no existiera. Tal como ha señalado en múltiples ocasiones el Dr. Esteban Morales, no podemos esperar a que los problemas nos den en el rostro o que nos lo impongan desde fuera. De igual manera que el tema de los derechos humanos, la homofobia, el matrimonio de personas con diversas opciones sexuales, la corrupción contrarrevolucionaria, la sociedad civil, el estado de derecho y otros, el tema del racismo y la discriminación racial hay que continuar abordándolo de frente y con todas sus aristas. Es necesario conocer tanto las intenciones y acciones de la denominada «afroderecha» para sembrar el odio, la desconfianza y la división entre los seres humanos de diversos fenotipos, como de la «afroizquierda» para reivindicar derechos humanos elementales como trabajo seguro, salud garantizada, acceso a los órganos de poder; y al mismo tiempo denunciar a los afrocomplacientes que cambian vergüenza y dignidad nacional por becas, eventos y viajes, o por besitos de piquito como certidumbre del entreguismo a quienes quieren imponernos sus problemas como si fueran los nuestros.
De igual manera que los temas de la representatividad según el color de la piel, a partir del talento y el trabajo, han sido tomados en consideración, como la diversidad religiosa, también habrá que colocar en la palestra pública la representatividad en los órganos de poder de los diferentes grupos humanos que viven en Cuba y no son cubanos de origen, pero están debidamente asociados y tienen a la Revolución Cubana como su Revolución. Si Cuba es de los países signatarios de la Convención de la UNESCO del 2005 sobre la diversidad de expresiones culturales, esa medida sería un acto de madurez política y una congruencia de respeto a la diversidad cultural. Eso superaría tanto la discriminación por fenotipos, identificada vulgarmente como «racial», como la discriminación étnica. Pues lo étnico no es la persona por fuera, por su apariencia, sino por dentro, por su cultura, por su lengua, por su lugar de origen, entre otros indicadores sobremanera estudiados por la antropología cultural, que marcan el derecho a la diferencia y que comúnmente los censos no recogen y que no están representados en los órganos del Poder Popular mediante su Asamblea Nacional.
De todos modos, el tema del racismo, como ideología, y la discriminación racial, como acción de esa ideología, hay que combatirla en todos los frentes, desde las personas con cargos públicos que impunemente se declaran racistas y que no siempre son denunciados, hasta los solapados que hacen más daño, pues demoran o retardan cualquier acción a favor de eliminar las desigualdades sociales y los accesos de la población más vulnerable a mejorar la calidad y nivel de vida.
R.M.L.G.- Pero, ¿y la concreción de las  acciones?
J.G.P.- Pienso que el asunto radica en no convertir el tema en una psicosis enfermiza y pasional, sino en un proceso de reflexión crítica colectiva y acción participativa a todos los niveles de la sociedad. El asunto no radica en un exorcismo de mea culpa, ni en importar miméticamente los problemas de otro país al nuestro, sino en propiciar que el partido-gobierno-estado identifique correctamente la diversidad del problema para facilitar soluciones duraderas y participativas a escala humana.
Este es un tema que desborda el simple color de la piel, aunque lo envuelve, y tiene que ver con las posibilidades y facilidades para el desarrollo sostenible desde el nivel local e insisto, a escala humana. Recordemos que el lineamiento 178 del VI Congreso del PCC, sobre la política agroindustrial señala:
Adoptar un nuevo modelo de gestión, a tenor con la mayor presencia de formas productivas no estatales, que deberá sustentarse en una utilización más efectiva de las relaciones monetario-mercantiles, delimitando las funciones estatales y las empresariales, a fin de promover una mayor autonomía de los productores, incrementar la eficiencia, así como posibilitar una gradual descentralización hacia los gobiernos locales (Lineamientos de la política económica y social del Partido y la Revolución, aprobado el 18 de abril de 2011:27).
Una descentralización inteligente, desde el paradigma de la socialización del socialismo daría un verdadero poder al Poder Popular y al desarrollo endógeno.
En ese contexto puede y debe insertarse el turismo cultural comunitario (como ya se hace en América Latina y el Caribe)  y puede coexistir con el de sol y playa y el de hoteles de cuatro y cinco estrellas. Todo depende de la capacidad generadora de los gobiernos locales y del potencial humano existente en las localidades. Todo depende de la cualidad facilitadora de los gobiernos locales para que los proyectos comunitarios sean sostenibles y tributen al beneficio social sin perder la estimulación permanente que excluya los métodos leoninos de una burocracia autofágica con la nación. No se le puede tener miedo al enriquecimiento lícito siempre que este sea ejemplo permanente para el desarrollo familiar, local y nacional. A mayor riqueza local menos carga para el Estado. El socialismo, si se quiere de verdad, tiene que ser incompatible con el cielo raso impuesto de la pobreza para la mayoría, pues parte de una pobreza mental.
Quisiera cerrar esta entrevista con el apoyo que representa el ideario martiano relacionado con el desarrollo local y con el valor que a ello otorgaba:
Cada cual se ha de poner, en la obra del mundo, a lo que tiene más cerca, no porque lo suyo sea, por ser suyo, superior a lo ajeno, y más fino o virtuoso, sino porque el influjo del hombre se ejerce mejor, y más naturalmente, en aquello que conoce, y de donde le viene inmediata pena o gusto: y ese repartimiento de la labor humana, y no más, es el verdadero e inexpugnable concepto de la patria (José Martí, OC, vol. V: 468).

Si la patria se mira, además, desde el valor de lo local en permanente desarrollo, podemos lograr que el racismo y la discriminación se transformen, algún día, en una amarga página superada por nosotros mismos, sin injerencias ni complacencias
R.M.L.G.- Muchas gracias profesor.

viernes, 6 de enero de 2012

Cuba define


Banderas frente a la sede diplomática de Washington en La Habana. Foto: Kaloian
Banderas frente a la sede diplomática de Washington en La Habana. Foto: Kaloian

Por Antonio Aponte
Del Blog Un grano de maíz

En 1989, el mundo asistió perplejo a la caída sin combate del campo socialista. Inmediatamente florecieron teorías para explicar al nuevo mundo que se estructuró sobre los escombros del muro de Berlín. Se llegó hasta vaticinar el fin de la historia, absurdo que aún sobrevive.
En Venezuela la situación fue similar. Salieron nuevas  interpretaciones del mundo y se produjo un cataclismo en la teoría revolucionaria. El escepticismo cundió, pasarse al campo contrarevolucionario era tolerado, bajaron las tensiones entre los revolucionarios y los dirigentes del status.
Muchos líderes revolucionarios pasaron a formar parte de los gabinetes de los gobiernos de la dominación. Se vendieron los libros de Marx y de Lenin a las librerías de usados, que los compraban a precio de papel de envolver. Era mal visto hablar de la época de la guerrilla, o se mencionaba con desprecio.
Todo parecía definido, el mundo se había reconstruido, el asunto era insertarse, conseguir ubicación en aquella arquitectura social que duraría por los siglos de los siglos.
Un hecho perturbaba a estos exrevolucionarios, ahora renegados: Cuba estaba allí, permanecía, resistía… ¿Por qué? ¿Por qué? Ninguna de sus neoteorías daba explicación a este hecho. Todas se estrellaban frente a la fortaleza moral cubana.
Las explicaciones llovieron con desespero: “está allí, pero tiene problemas, no hay jabón”. “Está allí, pero no hacen elecciones”. “Esta allí, pero no cumplen con los derechos humanos”. Explicaciones y justificaciones que se derretían al acercarse a los hechos: estaba allí, bloqueada, sin ayuda, sola en el mar del capitalismo, y no caía.
La lección era una: el Socialismo es viable y es el futuro de la humanidad.
Sólo un pueblo Socialista es capaz de la hazaña de la Cuba de aquellos días: ¡resistir a la caída del campo socialista, y al embate del imperio más poderoso que ha conocido la historia!
Ella preservó la esperanza.
Nos decía con su ejemplo que un mundo mejor es posible, que la historia no terminaba con el capitalismo, que la enfermedad era superable. Poco a poco, la humanidad volvió sus ojos a Cuba. Su llama heroica aún alumbra el camino de salida del infierno capitalista.
La posición frente a Cuba define a los revolucionarios. A ella nos une algo más que intereses materiales o afinidades ligeras: nos une la hermandad de remar juntos en el mismo barco, el de la redención del humano, el del Socialismo.
¡Viva Cuba Socialista!

miércoles, 4 de enero de 2012

Echar raíces en Cuba

 
 Por: Osmany Sánchez

 Hace pocos días conversaba con un amigo sobre los compañeros de aula y de beca que ya no estaban en el país pues emigraron a diferentes países, unos casados, otros por reunificación familiar o algunos que se “quedaron” luego de que le otorgaran alguna beca en el extranjero.
 Muy pocos están trabajando en lo que estudiaron y eso es una verdadera lástima pues se perdieron excelentes profesionales.
 Contrario a lo que algunos nos quieren hacer creer la “fuga de cerebros” no es un fenómeno exclusivo de Cuba sino que es un mal que desangra a todos los países del tercer mundo.
 Esa es una de las causas que más difícil hace la puesta en práctica de la anunciada reforma migratoria pues se debe buscar la fórmula que permita que todos los cubanos tengan el derecho a salir pero que a la vez nos proteja del robo descarado de profesionales que contra nuestro país tiene dirigido el gobierno de los Estados Unidos. Un ejemplo claro de esto es el programa creado para incentivar que los médicos cubanos que están de misión, salvando vidas en los países pobres, se presenten en las embajadas de los Estados Unidos donde reciben una visa y la residencia al año de permanecer en ese país.
 Cuando pienso en esos amigos que están en otros países y que no han estado vinculados nunca a alguna actividad violenta contra nuestro país, creo que se debe pensar en crear un programa, parecido al que tiene Argentina desde el 2003 dirigido a la repatriación de científicos de ese país que salieron buscando mejoras económicas.
 Son muchos los retos que tenemos por delante, por eso debemos que contar con todos, los de dentro y los de fuera, debemos darles la oportunidad de participar en la construcción de nuestro sistema del que mucho se alejaron no por problemas políticos sino meramente económicos.
 Algunos tendrán su vida hecha en otros países y no regresarán pero esos científicos que se formaron en Cuba y que adquirieron experiencia en el exterior pueden aportar mucho en la formación de las nuevas generaciones de profesionales cubanos a través de la docencia.
 Unos me dirán que soy iluso o que soy un soñador pero estoy seguro de que muchos de los que se fueron añoran regresar a sus centros de investigación o a sus aulas y aportar todo lo que saben pues para bien de todos los investigadores y del país, existe la voluntad del gobierno cubano de que no se queden engavetados los resultados de los trabajos de investigación sino que se pongan en práctica, sobre todo en el desarrollo local.
 Otros me dirán que antes de pensar en que regresen los profesionales de fuera hay que pensar en mejorar las condiciones de los que están dentro. Es cierto hay cosas que se deben priorizar por ejemplo tengo un amigo, que regresa ahora de una misión de 3 años y sin embargo sus ahorros no le alcanzan para comprar o construir una casa que es la máxima aspiración de la mayoría de los cubanos. Mucho menos pensar en comprarla con el salario.
 A unos y otros les respondo que son muchas las dificultades y varias las cosas que se deben cambiar pero los pasos se están dando y eso es lo importante. Queremos y trabajamos para tener un país de donde los jóvenes no quieran irse sino quedarse y esforzarse para obtener lo que sean capaces de ganarse con su trabajo.
En este post me refiero solo a los profesionales, a los científicos. No me refiero a los artistas y los deportistas porque aunque los incluiría en ese mismo programa, me gustaría hablar de ellos en otro momento para no mezclar los dos temas.